Libro, Capítulo

 1    1,      XI|           sin dejar cosa en su asiento:~ ~el mundo claro y exento~ ~
 2    1,    XXII| después con el tiempo hicieron asiento las ruinas de aquella isla
 3    1,     XXV|        Viracocha, el cual hizo asiento en Tiaguanaco, donde se
 4  III,    XXII|      trópico de Capricornio su asiento. Es tierra de suyo fértil
 5   IV,      IV|         como de más peso, hace asiento abajo. Benefíciase también
 6   IV,      VI|        de los metales de aquel asiento, y que estaba mejorado en
 7   IV,      VI|        cuarenta y cinco, en el asiento del Porco, por los dichos
 8   IV,     VII|       de Contratación de aquel asiento, y lo afirman hombres ancianos
 9   IV,    VIII|        cumbre hasta la falda y asiento del cerro según se cree,
10   IV,      XI|        ricos no pocos. Y aquel asiento de minas, que llaman Guancavelica,
11   IV,     XII|     como cosa más pesada, hace asiento en el suelo de la tina.
12    V,     XII|    cada ídolo en su particular asiento y haciéndole culto y veneración
13    6,     XIX|     indios sin ley, ni rey, ni asiento, sino que andan a manadas
14    6,     XIX|   donde hay alguna más orden y asiento, como son hoy día los de
15    7,      II|     como no tienen pueblos, ni asiento, el pelear con éstos es
16    7,       V|      rehacerse y pararon en un asiento que se dice Tula, que quiere
17    7,    VIII|       se fueron a buscar nuevo asiento; y discurriendo por la laguna,
18    7,     XII|       Coronado, y puesto en su asiento real, salió otro orador,