Acto, Escena

 1 Per       |                 El drama que damos a luz no lleva en sí nada que
 2 Per       |        convirtiéndose en épica, da a luz a Homero.~ ~ Homero, en
 3 Per       |            descripciones, llama a la luz del día, se lamenta, explica
 4 Per       |           hacían al aire libre, a la luz del sol, y duraban todo
 5 Per       |     antorchas, pero Jesucristo es la luz del día.~ ~ Por otra parte,
 6 Per       |      atropelladamente, unas hacia la luz y otras hacia la oscuridad.
 7 Per       |              bien y la sombra con la luz. La musa moderna preguntará
 8 Per       |         confundirlas, la sombra y la luz, lo grotesco y lo sublime,
 9 Per       |           reflejo vale tanto como la luz? ¿El satélite que se arrastra
10 Per       |             que la libertad, como la luz, penetrando por todas partes,
11 Per       |         sabido es que el color de la luz pierde con la reflexión
12 Per       |             que de una claridad haga luz y de una luz llama. Entonces
13 Per       |           claridad haga luz y de una luz llama. Entonces sólo el
14 Per       |             talento al que su propia luz no haga sombra, ni humo
15   I,     V|                  CARR.-Mi alma desea luz.~ ~ ROCHESTER.- (Pues haced
16  II,     V|          ocultáis sé yo encender una luz para conocer a los traidores. (
17  II,    XV|         Carlos I) El aire libre y la luz del sol quizá me tranquilicen.~ ~
18 III,    XV|             bujías.) ¿Para qué tanta luz? Basta con una sola, (Apaga
19 III,  XVII| constelaciones sólo son un fuego sin luz; porque tú no has visto,
20 III,  XVII|          resplandor sepulcral de esa luz. Ven, te necesito.~ ~ (Thurloe
21  IV,     V|           brilla aún en el cenit con luz pura y limpia; y combinando
22  IV,     V|          Manassé, mira la bolsa a su luz y retrocede con horror.) ¡
23  IV,  VIII|            mismo tiempo a la cara la luz de una linterna sorda.)~ ~
24  IV,  VIII|      naciente día derrame su primera luz, subiréis a la horca. ¡Fuera
25   V       |              empieza a amanecer y la luz del alba proyecta, a través
26   V,   XII|         alumbran a los pueblos, cuya luz siguen desde lejos. De lo
27   V,   XIV|             de una torre, sin ver la luz del día, sumido en perpetua