Acto, Escena

 1 Per       |     su causa aparecerá a los ojos de todo el mundo como una
 2   I,    II|     cuando vuestros hermosos ojos inflaman los corazones de
 3   I,    II|  lejos descubro los hermosos ojos y los bellísimos brazos...~ ~
 4   1,     I| puesto acaso algún fatuo los ojos en vuestra mujer? ¿Estáis
 5   1,   III| alguno?~ ~BLANCA inclina los ojos al suelo.~ ~BERARDA. -¡Jesús!
 6   1,    IV|     él. Desde el día que sus ojos hablaron a los míos, le
 7   1,    IV|     dinero.~ ~BLANCA. -A sus ojos se asoma un gran corazón.~ ~
 8   1,    IV| tenerlo aquí, delante de mis ojos...~ ~Sale el REY de su escondite
 9   1,    IV|  amor tu alma virginal y tus ojos a la luz, porque el amor
10   1,    IV|      BLANCA. (Inclinando los ojos al suelo) -Ya lo habéis
11   1,     V|   venda que le ata sobre los ojos y sobre las orejas.~ ~¿Y
12   1,     V|  tunantes me han vendado los ojos!~ ~Se arranca la venda y
13   2,    II|      arrancar lágrimas a tus ojos, quisiera morir y que mis
14   2,   III|     mi hija? Una mujer a sus ojos no vale nada: cuando el
15   2,    IV|   crápula, y al levantar los ojos al cielo, sólo reposaba
16   2,    IV|      BLANCA. (Levantando los ojos al cielo.) -(¡Oh Dios! ¡
17   3,     I| convencieras por tus propios ojos, le seguirías amando?~ ~
18   3,    II|  primera vez vi tus hermosos ojos; pues desde entonces te
19   3,     V|   esto? Yo que vivía con los ojos cerrados, en completa ignorancia
20   4,    IV|    padre y entreabriendo los ojos con desfallecimiento.) -¿
21   4,     V|    sonreía mirándome con sus ojos divinos, mientras yo le
22   4,     V|   pronto la veréis abrir los ojos. Ya estáis viendo que hablo