Victor Hugo
El Rey se divierte

Acto cuarto

Escena primera

«»

Enlaces a las concordancias:  Normales En evidencia

Link to concordances are always highlighted on mouse hover

Escena primera

TRIBOULET y BLANCA fuera, SALTABADIL dentro de la casa TRIBOULET está inquieto y preocupado; SALTABADIL, sentado junto a la mesa, se ocupa en limpiar su tahalí.

TRIBOULET. -¿Y tú le amas?

BLANCA. -Le amo y no le puedo olvidar.

TRIBOULET. -En vano dejé que pasara el tiempo para que te curara de ese amor insensato.

BLANCA. -En vano, padre mío.

TRIBOULET. -Explícame al menos por qué la amas.

BLANCA. -No lo .

TRIBOULET. -¿Porque es rey?

BLANCA. -No, no, no es por eso. Hay hombres que salvan las vidas a sus esposas, maridos que las hacen opulentas, pero no por eso les aman. Ese hombre sólo me ha causado daño, y sin embargo, le quiero sin saber por qué. Y llega a tal punto mi locura, que a pesar de ser vos tan tierno para mí y él tan cruel, lo mismo moriría por él que por vos.

TRIBOULET. -Eres muy niña y te perdono.

BLANCA. -Pero él también me ama.

TRIBOULET. -No lo creas, hija mía.

BLANCA. -Me lo dijo y me lo juró. Además, sus palabras convencen y avasallan el corazón, ¡porque es tan hermoso, tan gallardo!...

TRIBOULET. -Es un infame y no se jactará de robarme impunemente mi tesoro.

BLANCA. -Le habías perdonado ya, padre mío.

TRIBOULET. -No; sólo di treguas a mi venganza, mientras le tendía el lazo que le tengo ya preparado.

BLANCA. -Desde hace un mes creí que habíais concluido por querer al rey.

TRIBOULET. -Lo aparentaba, pero te vengaré, Blanca, te vengaré.

BLANCA. -¡Perdonadle, padre mío!

TRIBOULET. -Estarías como yo colérica contra él si te convencieras de que te está engañando.

BLANCA. -No, no puedo creer que me engañe.

TRIBOULET. -¿Si te convencieras por tus propios ojos, le seguirías amando?

BLANCA. -No lo ..., ayer mismo me repitió que me adora.

TRIBOULET. -¿Cuándo? (Amargamente.)

BLANCA. -Por la noche.

TRIBOULET. -Pues ven aquí: mira si ves algo.

Indicándole a BLANCA una grieta de la pared, por la que ella se pone a observar.

BLANCA. -Sólo veo a un hombre.

TRIBOULET. -Espera un poco y sigue mirando.

Aparece el REY vestido de simple oficial en la sala baja de la hostería, saliendo por la puertecilla de un aposento inmediato.

BLANCA. (Estremeciéndose.) -¡Padre, es él!

Sigue .




«»

Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License