Victor Hugo
El Rey se divierte

Acto quinto

Escena primera

«»

Enlaces a las concordancias:  Normales En evidencia

Link to concordances are always highlighted on mouse hover

Escena primera

TRIBOULET

Avanza lentamente por el foro embozado en la capa. Ha cesado la lluvia y va alejándose la tempestad. De vez en cuando relampaguea y truena.

Por fin voy a vengarme; quizá me habré vengado ya. Pronto hará un mes que espero y que espío, representando mi papel de bufón, devorando mi rabia interior y llorando lágrimas de sangre detrás de mi máscara burlona. Ésta es la puerta..., por aquí lo deben sacar..., pero aún no debe ser hora. (Truena.) Noche es ésta horrible, y horrible misterio el que oculta una tempestad en el cielo y un asesinato en la tierra; ¡mi cólera esta noche relampaguea como la de Dios!... Inmolo a un rey, del que dependen veinte reyes, un rey que mantiene el peso del mundo entero, y que se conmoverá en cuanto el rey no exista. Cuando prive a Europa del equilibrio, cuando eche al río el cadáver del rey, la Europa se desquiciará. Si Dios mañana preguntase a la tierra: «¿Qué volcán acaba de abrir el cráter? ¿Quién agita al cristiano y al turco? ¿A Clemente, a Doria, a Carlos V y a Solimán? ¿Qué César, qué guerrero, qué apóstol mueve las naciones a la lucha?» La tierra contestaría: «¡Triboulet!» La venganza de un loco va a hacer oscilar al mundo.

Pausa. Dan las doce en un reloj lejano.

¡Las doce!

Corre a la puerta y llama.

UNA VOZ. (Dentro.) -¿Quién es?

TRIBOULET. -Yo.

LA VOZ. -Bien.

Ábrese el tablero de bajo de la puerta.

TRIBOULET. -Vamos pronto.

LA VOZ. -No entréis.

SALTABADIL sale arrastrándose por la abertura inferior de la puerta, y por ella arrastra algo pesado y metido en un saco, que apenas se distingue en la oscuridad.




«»

Best viewed with any browser at 800x600 or 768x1024 on Tablet PC
IntraText® (VA2) - Some rights reserved by EuloTech SRL - 1996-2010. Content in this page is licensed under a Creative Commons License