IntraText Índice: General - Obra | Palabras: Alfabética - Frecuencia - Inverso - Longitud - Estadísticas | Ayuda | Biblioteca IntraText | Búsqueda |
Link to concordances are always highlighted on mouse hover
Salen REBOLLEDO, la CHISPA, y algunos
REBOLLEDO: ¿Cuerpo de Cristo con quien
TODOS: ¡Amén!
REBOLLEDO: ¿Somo gitanos aquí,
con una caja...
REBOLLEDO: ...que este rato que calló
SOLDADO 2: No muestres de eso pesar,
REBOLLEDO: ¿A qué entrada, si voy muerto?
para alojar; pues es cierto
Y nosotros, muy menguados,
y para mi mendicante.
Pues, ¡voto a Dios!, que si llego
por diligencia o por ruego,
que ha de ser sin mí la ida;
pues no, con desembarazo
será el primero tornillazo
SOLDADO 1: Tampoco será el primero,
la tiene también de ser
REBOLLEDO: ¿Ven ustedes todo eso?
SOLDADO 2: ¿De eso un soldado blasona?
REBOLLEDO: Po mí muy poco me inquieta;
sino por esa pobreta
CHISPA: Seor Rebolledo, por mí
menos, que para sufrir
donde todo sobra, pues
y pues a venir aquí
con Rebolledo, sin ser
REBOLLEDO: ¡Viven los cielos, que eres
SOLDADO 2: Aquesa es verdad bien clara.
Y más, si, por divertir
CHISPA: Responda a esa petición
REBOLLEDO: Y yo ayudaré también.
Sentencien los camaradas
SOLDADO 1: ¡Vive Dios, que han dicho bien!
CHISPA: "Yo soy tiritiritaina,
flor de la jacarandana.
REBOLLEDO: "Yo soy tiritiritina,
flor de la jacarandina.
CHISPA: "Vaya a la guerra el alférez,
y embárquese el capitán.
REBOLLEDO: "Mate moros quien quisiere;
CHISPA: "Vaya y venga la tabla al horno,
REBOLLEDO: "Huéspeda, máteme una gallina,
SOLDADO 1: Aguarda; que ya me pesa
--que íbamos entretenidos
en nuestros mismos oídos ---,
caballeros, de ver esa
que donde paremos sea.
REBOLLEDO: ¿Es aquélla Zalamea?
CHISPA: Dígalo su campanario.
en lograrle; porque
esto me divierte tanto,
que como de otras no ignoran,
REBOLLEDO: Hagamos aquí alto, pues
por si hemos de entrar marchando
o en tropas.
está.
Salen don ÁLVARO y el SARGENTO
de aquí no hemos de salir,
y hemos de estar alojados
toda, y no salga de aquí
a Guadalupe, hasta que
REBOLLEDO: Albricias pedir podías.
TODOS: ¡Vítor nuestro capitán!
ÁLVARO: Ya está hecho el alojamiento.
aquella jacarandina;
"Huéspeda, máteme una gallina;
Vanse todos, y quedan el CAPITÁN y el
ÁLVARO: Señor sargento, ¿ha guardado
las boletas para mí
que me tocan?
ÁLVARO: ¿Y dónde estoy alojado?
SARGENTO: En la casa de un villano,
del lugar, de quien después
más pompa y más presunción,
ÁLVARO: Bien a un villano conviene
SARGENTO: Dicen, que esta es la mejor
yo la escogí para ti,
no tanto porque lo sea,
como porque en Zalamea
SARGENTO: ...como una hija suya.
ÁLVARO: Pues,
será más que una villana
SARGENTO: ¡Que haya en el mundo quien diga
eso!
SARGENTO: ¿Hay más bien gastado rato
sino ociosidad no más --
a propósito jamás?
ÁLVARO: Cosa es que en toda mi vida,
porque en no mirando yo
que no es mujer para mí.
SARGENTO: Pues para mí, señor, sí,
cualquiera que se me ofrece.
que me pienso entretener
con ella.
"Aquella es mi dama," y no,
"Aquella es mi labradora."
Mas, ¿qué ruido es ese?
ÁLVARO: ¡Qué figura tan notable!
SARGENTO: Vamos, señor; que ya es hora.
ÁLVARO: Lléveme el sargento antes
Vanse. Salen don MENDO, hidalgo de figura, y
MENDO: ¿Dijiste al lacayo, di,
que tanto a un bruto descanse.
MENDO: ¿Y que a los galgos no aten,
mas no el carnicero.
NUÑO: ¿Si te prenden el palillo
aquí y en cualquiera parte
lo sustentaré.
no sería sustentarme
a mí que al otro, que en fin
te sirvo?
en el pueblo?
MENDO: Lástima da el villanaje
NUÑO: Más lástima da y más grande
con los que no espera...
MENDO: ¿Quién?
NUÑO: La hidalguez, y no te espante;
¿por qué piensas que es?
MENDO: ¿Por qué?
NUÑO: Porque no se mueran de hambre.
MENDO: En buen descanso esté el alma
pues en fin me dejó una
ejecutoria tan grande,
MENDO: Aunque, si reparo en ello,
no tengo que agradecerle
de que hidalgo me engendrase;
porque yo no me dejara
engendrar, aunque él porfiase,
MENDO: No fuera, sino muy fácil.
y así ignoras los principios.
NUÑO: Sí, mi señor, y aun los antes
y postres, desde que como
contigo; y es, que al instante
MENDO: Yo no digo esos principios.
que antes comieron sus padres...
NUÑO: ¿Luego tus padres comieron?
MENDO: ...esto después se convierte
de excremento semejante."
NUÑO: Ahora digo que es verdad.
MENDO: ¿Qué?
los ingenios.
¿téngola yo?
son ya las tres, y no hay greda,
que tu saliva y la mía.
MENDO: Pues, ¿esa es causa bastante
para tener hambre yo?
que no somos todos unos;
de esto, pues ya de Isabel
NUÑO: ¿Por qué, si de Isabel eres
Pues con esto tú y su padre
remediaréis de una vez
que a un hombre llano por fuerza
había de admitir?
NUÑO: Pues antes
para suegro era importante;
tropezones, en que caen
los yernos; y si no has
de casarte, ¿por qué haces
MENDO: ¿Pues no hay, sin que yo me case,
NUÑO: Temo si acierta a mirarme
Pero Crespo.
MENDO: ¿Qué ha de hacer,
NUÑO: Sí, haré. Aunque no he de sentarme
con él a la mesa.
NUÑO: Albricias que, con su prima
MENDO: Di que por el bello oriente,
hoy, repitiéndose el sol,
Salen a la ventana ISABEL e INÉS,
prima, así el cielo te guarde,
verás los soldados, que entran
en el lugar.
estando ese hombre en la calle,
Inés, pues ya, en cuánto el verle
de servirte y festejarte.
ISABEL: No soy más dichosa yo.
de hacer sentimiento de esto.
ISABEL: Pues, ¿qué había de hacer?
ISABEL: ¿Donaire de los disgustos?
MENDO: Hasta aqueste mismo instante
--que es juramento inviolable --
que no había amanecido;
mas, ¿qué mucho que lo extrañe,
hasta que a vuestras auroras
ISABEL: Ya os he dicho muchas veces,
señor don Mendo, cuán en balde
MENDO: Si las mujeres hermosas
ISABEL: Cuando no baste el decirlos,
INÉS: Señor caballero andante,
que de aventurero entráis
siempre en lides semejantes,
porque de mantenedor,
las hermosuras se salen
con cuanto ellas quieren. ¡Nuño!
NUÑO: ¡Oh qué desairados nacen
todos los pobres!
NUÑO: Pedro Crespo viene aquí.
MENDO: Vamos por esta otra parte,
JUAN: (¡Que siempre que venga halle Aparte
MENDO: No te turbes ni embaraces.
CRESPO: Mas Juanico viene aquí.
JUAN: Pero aquí viene mi padre.
MENDO: Disimula. Pedro Crespo,
JUAN: (Algún día he de enojarme.) Aparte
CRESPO: De las eras; que esta tarde
pues de los granos de aqueste,
es todo el cielo el contraste.
Allí el bieldo, hiriendo a soplos
¿Oh, quiera Dios, que en las trojes
yo llegue a encerrarlo, antes
Tú, ¿qué has hecho?
CRESPO: Naces bien, si los pagaste.
JUAN: No los pagué; que no tuve
dineros para ellos; antes
CRESPO: Pues escucha antes de hablarme;
dos cosas no has de hacer nunca,
porque, si por accidente
JUAN: El consejo es como tuyo,
SARGENTO: ¿Vive Pedro Crespo aquí?
CRESPO: ¿Hay algo que usté le mande?
SARGENTO: Traer a casa la ropa
CRESPO: No digáis más, esto baste;
Y en tanto, que se le hace
a que se sirva de todo.
SARGENTO: Él vendrá luego al instante.
JUAN: ¡Que quieras, siento tú rico,
vivir a estos hospedajes
excusarlos ni excusarme?
JUAN: Comprando una ejecutoria.
CRESPO: Dime por tu vida, ¿hay alguien
Pues, ¿qué gano yo en comprarle
una ejecutoria al Rey
mejor que ahora? No, es dislate.
Pues, ¿qué dirán? Que soy noble
y esto es dinero y no es honra;
un ejemplillo escucharme?
una cabellera. Éste,
trae fulano." Pues, ¿qué hace,
si, aunque no le vean la calva,
remediarse de su parte,
del sol, del hielo y del aire.
CRESPO: Yo no quiero honor postizo
que el defecto ha de dejar
CRESPO: Hija, el Rey, nuestro señor,
soldados, y es importante,
en esos desvanes, donde
yo vivía.
ISABEL: A suplicarte
aquí es estar solamente
En ese cuarto mi prima
de nosotras.
algo con qué regalarles.
(Mas tengo por disparate Aparte
Vanse [ISABEL e INÉS]. Salen don
SARGENTO: Ésta es, señor, la casa.
ÁLVARO: Pues del cuerpo de guardia al punto pasa
toda mi ropa.
registrar la villana lo primero.
a aquesta casa; que ventura ha sido
grande venir a ella un caballero
tan noble como en vos le considero.
(¡Qué galán y alentado! Aparte
Envidia tengo al traje de soldado.)
ÁLVARO: Vos seáis bien hallado.
JUAN: Perdonaréis, no estar acomodado;
que hoy un alcázar esta casa fuera.
que comáis, que desea regalaros,
y yo voy a que esté vuestro aposento
JUAN: Estaré siempre a vuestros pies postrado.
Vase [JUAN] y sale el SARGENTO
ÁLVARO: ¿Qué hay, sargento? ¿Has ya visto
a la tal labradora?
no he dejado cocina ni aposento
ÁLVARO: Sin duda el villanchón la ha retirado.
SARGENTO: Pregunté a una crïada
por ella, y respondióme que ocupada
en ese cuarto alto, y que no había
de bajar nunca acá, que es muy celoso.
ÁLVARO: ¿Qué villano no ha sido malicioso?
De mí digo, que, si hoy aquí la viera,
y sólo porque el viejo la ha guardado,
deseo, vive Dios, de entrar me ha dado
donde está.
para que allá, señor, con causa entremos,
ÁLVARO: Solo por tema la he de ver, y una
de mucho ingenio para quien la vea
que con eso será más celebrada.
ÁLVARO: Tú has de fingir... Mas no, pues que ha venido
ese soldado, que es más despejado,
él fingirá mejor lo que he trazado.
REBOLLEDO: Con este intento vengo
a hablar al capitán, por ver si tengo
dicha en algo.
que le obliges; que en fin no ha de ser todo
REBOLLEDO: Préstame un poco tú de tu cordura.
REBOLLEDO: Mientras hablo con él, aquí me espera.
[Habla REBOLLEDO] a don ÁLVARO
Yo vengo a suplicarte...
ayudaré, por Dios, a Rebolledo,
porque me ha aficionado
ÁLVARO: Pues, ¿qué hay que se le ofrezca?
cuanto dinero tengo y he tenido
y he de tener, porque de pobre juro,
en presente, en pretérito y futuro.
Hágaseme merced de que por vía
de ayudilla de costa aqueste día
REBOLLEDO: El juego del boliche por mi cuenta;
de obligaciones y honbre al fin honrado.
ÁLVARO: Digo que eso es muy justo,
y el alférez sabrá que este es mi gusto.
CHISPA: (Bien le habla el capitán. ¡Oh si me viera
llamar de todos ya la bolichera!)
que le lleves, de ti fïarme quiero
para cierta invención que he imaginado,
con que salir intento de un cuidado.
REBOLLEDO: Pues, ¿qué es lo que se aguarda?
Lo que tarda en saberse, es lo que tarda
en hacerse.
por ver sien él una persona habita,
que de mí hoy esconderse solicita.
REBOLLEDO: Pues, ¿por qué no le subes?
sin que alguna color para esto hubiera,
por disculparlo más; y así, fingiendo
que yo riño contigo, has de irte huyendo
por ahí arriba. Yo entonces enojado
la espada sacaré. Tú muy turbado
has de entrarte hasta donde
esta persona que busque se esconde.
REBOLLEDO: Bien informado quedo.
CHISPA: (Pues habla el capitán con Rebolledo
desde hoy me llamarán la bolichera.)
REBOLLEDO: ¡Voto a Dios que han tenido
esta ayuda de costa, que he pedido,
un ladrón, un gallina y un cuitado,
y ahora que la pide un hombre honrado,
¿se la dan?
CHISPA: (¡Ya empieza su tronera!)
ALVARO: Pues, ¿cómo me habla a mí de esa manera?
REBOLLEDO: ¿No tengo de enojarme
ÁLVARO: No, ni ha de hablarme;
y agradezca que sufro aqueste exceso.
REBOLLEDO: Ucé es mi capitán, sólo por eso
callaré. Mas, ¡por Dios!, que si yo hubiera
CHISPA: ¡Tente, señor! (Su muerte considero.)
REBOLLEDO: ...que me hablara mejor.
ÁLVARO: ¿Qué es lo que espero,
que no doy muerte a un pícaro atrevido?
REBOLLEDO: Huyo, por el respeto que he tenido
a esa insignia.
CHISPA: (Ya él hizo de las suyas.)
CHISPA: (Ya no me llamarán la bolichera.)
Éntrale acuchillando y salen JUAN con espada
CRESPO: ¿Qué ha sucedido aquí?
CHISPA: Que la espada ha sacado
el capitán aquí para un soldado,
CRESPO: ¿Hay suerte más esquiva?
esconder a mi prima y a mi hermana.
Éntranse y salen REBOLLEDO huyendo, e ISABEL
e INÉS
REBOLLEDO: Señoras, si siempre ha sido
ISABEL: ¿Quién a vos de esa manera
os obliga?
ISABEL: ¿Quién os sigue o busca?
Salen don ÁLVARO y el SARGENTO
ÁLVARO: Yo;
Si pensase....
si no por lo que ellas son,
ÁLVARO: No pudiera otro sagrado
ponéis en obligación
tan presto la intercesión.
os suplico; pero no
a que agradecida estoy.
ÁLVARO: No sólo vuestra hermosura
es derara perfección,
pero vuestro entendimiento
lo es también; porque hoy en vos
Salen Pedro CRESPO y JUAN, las espadas desnudas
CRESPO: ¿Cómo es eso, caballero?
os hallo...
ISABEL: (¡Válgame Dios!) Aparte
CRESPO: ...requebrando a una mujer?
pues que tan presto se os pasan
los enojos.
con obligaciones debe
acudir a ellas; y yo
que no dama.
de que piensen, que me engañan,
CRESPO: ¿Quién os mete en eso a vos,
rapaz? ¿Que disgusto ha habido?
y el de su respeto yo.
ÁLVARO: Claro está, que no habrá sido
lo que decís.
muy bien.
CRESPO: Pues, ¿cómo habláis vos
así?
ÁLVARO: Porque estáis delante,
a este rapaz.
JUAN: Y yo sufrirlo a mi padre,
mas a otra persona no.
ÁLVARO: ¿Qué habíais de hacer?
ÁLVARO: ¿Qué opinión tiene un villano?
ÁLVARO: ¡Vive Dios, que ya es bajeza
de por medio.
Chispa, que ha de haber hurgón!
CHISPA: ¡Aquí del cuerpo de guardia!
REBOLLEDO: ¡Don Lope, ojo avisor!
Sale don LOPE con hábito, muy galán,
y bengala
LOPE: ¿Qué es aquesto? ¿La primera
ha de ser una cuestión?
ÁLVARO: (¡A qué mal tiempo don Lope Aparte
CRESPO: (¡Por Dios, que se las tenía Aparte
con todos el rapagón!)
LOPE: ¿Qué ha habido? ¿Qué ha sucedido?
Hablad, porque, ¡votos a Dios!,
hasta aquí, con el dolor
de esta pierna, que los diablos
no decirme, "Aquesto ha sido"?
CRESPO: Todo eso es nada, señor.
LOPE: Hablad, decid la verdad.
ÁLVARO: Pues es que alojado estoy
a que sacase con él
la espada. Hasta aquí se entró
labradoras, y su padre
o su hermano -- o lo que son --
se han disgustado de que
entrase hasta aquí.
LOPE: Pues yo
la espada?
REBOLLEDO: (¡A que pago yo Aparte
por todos!)
el que huyendo hasta aquí entró.
LOPE: Denle dos tratos de cuerda.
REBOLLEDO: Tras... ¿Qué me han de dar, señor?
CHISPA: (De esta vez me lo estropean.) Aparte
ÁLVARO: (¡Ah, Rebolledo, por Dios, Aparte
que te libren.)
REBOLLEDO: (¿Cómo no
lo he de decir, pues si callo,
para tener ocasión
de entrar aquí.
LOPE: No tuvisteis, para haber
--Que al cuerpo de guardia vayan
y que no salga ninguno,
pena de muerte, en todo hoy --
Y para que no quedéis
y satisfechos los dos,
buscad otro alojamiento;
para mí.
por la merced, que me hicisteis
de perderme.
CRESPO: Dando muerte a quien pensara
LOPE: ¿Sabes, ¡voto a Dios!, que es
le matara.
le ahorcara.
que también le ahorcara yo.
LOPE: ¿Sabéis que estáis olbigado
estas cargas?
pero con mi fama no.
es patrimonio del alma,
LOPE: ¡Juro a Cristo!, que parece
CRESPO: Sí, ¡juro a Cristo!, porque
LOPE: Yo vengo cansado, y esta
CRESPO: Pues, ¿quién os dice que no?
Ahí me dio el diablo una cama,
LOPE: ¿Y dióle hecha el diablo?
CRESPO: Sí.
LOPE: Pues a deshacerla voy,
que estoy, ¡voto a Dios!, cansado.
CRESPO: Pues descansad, ¡voto a Dios!
LOPE: (Testarudo es el villano; Aparte
también jura como yo.)
CRESPO: (Caprichoso es el don Lope Aparte