Cap.

 1     I|      no ha nacido sino para la alegría, que no le gustarían tan
 2    IV|      enteraba con arrebatos de alegría que la ocupaba en hacer
 3    IV|       de morir de asombro y de alegría. No creía en absoluto en
 4    IV|        esperanza, de amor y de alegría. El fénix hizo detener el
 5     V|        Babilonia se enteró con alegría de este razonamiento y de
 6   VII|      su navío; lanza gritos de alegría que sorprenden a todas las
 7   VII| mancebo pudiese provocar tanta alegría; en cuanto al fénix, no
 8     X|       de la buena sociedad, la alegría, la frivolidad, eran para
 9     X|      libertad era decorosa, la alegría no era estridente, la ciencia
10    XI| Pirineos, no vio más júbilo ni alegría. Si escuchó algunas canciones
11    XI|      del fénix, disfrutaba una alegría pura y se hallaba embriagado
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